IV
El cielo se vino abajo
esta noche
las ventanas los árboles las puertas
se estremecían a oscuras.
Parece todo más limpio
ni rastro de la furia
el sol se entrega con desparpajo
como si mintiéramos
como si fuera incierta
esta lluvia
esta humedad hasta los huesos.
De Memoria errante, 2009